La inclusión y la diversidad no solo son temas de justicia social: también son pilares de sostenibilidad y competitividad en las grandes empresas del siglo XXI. En este contexto, Pemex ha comenzado una transformación significativa para cerrar brechas históricas de género, tanto en sus oficinas directivas como en los entornos operativos tradicionalmente dominados por hombres.
Como especialista en responsabilidad social y equidad corporativa, en este artículo te presento un análisis profundo sobre cómo la empresa más grande de México está abordando la igualdad de género, qué avances tangibles ha logrado para 2025 y por qué esto no solo mejora la cultura organizacional, sino que también crea valor social y económico.
Un cambio de paradigma en el sector energético
Históricamente, el sector energético —y particularmente la industria del petróleo— ha sido uno de los espacios laborales con menor participación femenina. Las cifras eran contundentes: menos del 10% de los trabajadores operativos en campo eran mujeres hasta hace pocos años, y la presencia femenina en puestos de liderazgo era marginal.
Pemex, como emblema del modelo energético mexicano, no era la excepción. Sin embargo, en los últimos años, la compañía ha reconocido que la equidad de género no es solo una exigencia legal o reputacional, sino una estrategia para atraer talento, aumentar la innovación y reducir rotación de personal.
Desde 2020, se han lanzado diversas iniciativas enfocadas en aumentar la participación de mujeres, prevenir la violencia de género y crear entornos más equitativos y seguros para todas las personas trabajadoras.
Estrategias de equidad implementadas por Pemex
Para alcanzar sus objetivos en equidad, Pemex ha adoptado un enfoque integral que abarca desde reclutamiento hasta liderazgo ejecutivo. Algunas de las acciones más relevantes en 2025 incluyen:
- Programas de mentoría y liderazgo femenino: se han creado redes internas de mujeres líderes, con talleres de formación, acceso a mentoras senior y planes de carrera adaptados. Esto ha permitido a más mujeres escalar posiciones en áreas técnicas, jurídicas, administrativas y operativas.
- Políticas de contratación con perspectiva de género: los nuevos procesos de selección dan prioridad a la paridad en igualdad de competencias. Además, se aplican protocolos para eliminar sesgos inconscientes en entrevistas y evaluaciones.
- Ambientes laborales seguros e inclusivos: Pemex ha reforzado sus mecanismos de denuncia de acoso laboral y sexual, creando canales confidenciales, medidas de protección y capacitaciones obligatorias sobre perspectiva de género para todo el personal.
- Flexibilidad laboral y conciliación: con el objetivo de promover la permanencia de mujeres en puestos clave, se han implementado medidas como horarios flexibles, licencias de maternidad ampliadas, trabajo remoto para funciones administrativas y guarderías corporativas.
Todas estas estrategias son auditadas por el Comité de Responsabilidad Social y están alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, especialmente el ODS 5: Igualdad de género.
Datos y avances reales en 2025
Más allá de las buenas intenciones, Pemex ha mostrado resultados concretos en sus indicadores de equidad. A continuación, algunos datos destacados que reflejan el progreso en esta materia:
- Participación femenina en la fuerza laboral total: en 2025, las mujeres representan el 30.8% de todo el personal de Pemex, frente al 21.2% en 2019.
- Presencia en puestos directivos: hoy, el 25% de los cargos de dirección media y alta son ocupados por mujeres, frente al 12% hace seis años. Esto incluye subdirectoras de exploración, gerentas de logística y coordinadoras de proyectos estratégicos.
- Operadoras en campo: uno de los avances más visibles ha sido la incorporación de mujeres en tareas operativas de refinerías, terminales de almacenamiento y plataformas offshore, con más de 1,500 trabajadoras en roles técnicos.
- Capacitación y sensibilización: más de 85,000 empleados han tomado cursos obligatorios sobre equidad de género, masculinidades positivas y erradicación de la violencia laboral.
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Obstáculos que aún persisten
Aunque los avances son importantes, también es necesario reconocer que existen desafíos estructurales que aún deben ser enfrentados:
- Brecha salarial persistente: si bien las mujeres y hombres en los mismos cargos tienen salarios similares en los nuevos contratos, aún persiste una diferencia del 7-10% en niveles jerárquicos antiguos.
- Estereotipos en puestos operativos: en zonas petroleras rurales o en plataformas offshore, muchas mujeres reportan discriminación sutil o falta de infraestructura adecuada (como sanitarios exclusivos o protocolos para emergencias médicas femeninas).
- Subrepresentación en áreas STEM: Pemex ha detectado una menor proporción de candidatas mujeres en carreras científicas y técnicas, lo que limita la velocidad de paridad en áreas como ingeniería o geofísica.
Frente a estos obstáculos, la empresa continúa colaborando con universidades, institutos técnicos y organizaciones de la sociedad civil para fomentar vocaciones científicas en mujeres jóvenes y promover entornos laborales más equitativos.
Tabla: Participación femenina en Pemex (2020 vs 2025)
| Indicador | 2020 | 2025 |
|---|---|---|
| Participación femenina total | 21.2% | 30.8% |
| Mujeres en dirección media y alta | 12.0% | 25.0% |
| Técnicas operativas en campo | 3.8% | 9.6% |
| Cursos sobre equidad completados | 18,000 | 85,000+ |
| Denuncias atendidas con protocolo de género | No reportado | 100% |
El impacto de la equidad en la competitividad
Promover la equidad de género no es solo un deber ético o un mandato legal. Es una decisión estratégica que incrementa la capacidad de innovación, mejora la reputación institucional y atrae inversión responsable.
Fondos internacionales de inversión —como BlackRock, PIMCO o el IFC— han comenzado a evaluar los proyectos energéticos mexicanos también desde criterios de sostenibilidad social (ESG). En ese sentido, los avances de Pemex en equidad de género representan un punto a favor para su financiamiento.
Además, un entorno laboral más inclusivo reduce rotación de talento, mejora la productividad y fortalece la cultura organizacional, convirtiendo a Pemex en una empresa más moderna y competitiva.
Para más información, visita pemexmexico.com: equidad de género en Pemex.